BUENOS AIRES.- La presidenta, Cristina Fernández, tomó ayer juramento a los nuevos ministros de Seguridad, Arturo Puricelli, y de Defensa, Agustín Rossi, en el primer cambio de gabinete desde que asumió su segundo periodo presidencial.

El Salón Blanco se llenó de militantes que durante toda la ceremonia entonaron cánticos para apoyar al "Chivo", apodo con que se lo conoce a Rossi.

La jefa del Estado tomó en primer lugar juramento al nuevo ministro de Defensa quien, antes de firmar el acta, mostró al público una birome BIC, la misma lapicera que usaba el ex presidente Néstor Kirchner.

Puricelli, hasta ayer ministro de Defensa, prestó juramento a continuación como nuevo titular de la cartera de Seguridad, en reemplazo de Nilda Garré, que fue propuesta por la primera mandataria como embajadora ante la Organización de Estados Americanos (OEA).

Con la ausencia del vicepresidente Amado Boudou, y la asistencia de la mayoría del gabinete, ya que el canciller Héctor Timerman está en el exterior, entre el público se mezclaron dirigentes políticos, sindicales y sociales con algunos artistas como Federico Luppi. Fue así que en las primeras filas al lado de los titulares de la CGT oficialista, Antonio Caló, y de la CTA, Hugo Yasky, se sentaron la titular de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto y Susana Trimarco, quien quedó ubicada frente a la presidenta provisional del Senado, Beatriz Rojkés.

En el otro costado del Salón quedaron Luis D'Elia, Fernando el "Chino" Navarro y el titular de La Cámpora, Andrés "Cuervo" Larroque. Como ordena el protocolo cuando asume un nuevo ministro de Defensa, frente al estrado se ubicaron los jefes de las Fuerzas Armadas.

La Presidenta permaneció unos minutos en el Salón, tomó el juramento y se retiró rápidamente a su despacho sin saludar a familiares y amigos de los nuevos ministros como es costumbre.

Durante la mañana, Puricelli salió al cruce de quienes vaticinaban que su relación con el segundo de esa cartera, Sergio Berni, sería tan conflictiva como cuando estaba a cargo de Garré. Dijo que se llevará perfectamente bien con este funcionario. Por su parte, Rossi se retiró sin hablar con los periodistas.

Reclamo

A poco de asumir Rossi, diputados nacionales macristas y peronistas disidentes le reclamaron que "se ocupe de los temas en los que sus antecesores fracasaron", como "la falta de radares en la frontera norte" del país y "el robo de armas de guerra en dependencias militares".

A través de una carta, los opositores alertaron sobre "la falta de control existente en las fronteras del país, especialmente la Norte, donde no se instaló la cantidad necesaria de radares 3D para un adecuado resguardo del espacio aéreo". También advirtieron sobre la salida ilegal de vuelos "con armas, drogas y cualquier otro tipo de producto contrabandeados".

Se trata de los diputados Julián Obiglio, Paula Bertol, Cornelia Schmidt Liermann, Pablo Tonelli, Gladys González, Silvia Majdalani, Enrique Thomas, Gustavo Ferrari, Eduardo Amadeo, Carlos Brown, Omar De Marchi, Roberto Pradines y Patricia Bullrich. (DyN)